La infancia es una etapa clave en el desarrollo intelectual, social y emocional del niño. Una buena salud visual es fundamental para garantizar un crecimiento equilibrado y un aprendizaje adecuado.

Cualquier defecto visual no detectado a tiempo puede derivar en problemas mayores en el futuro. Aunque a menudo se piensa que los problemas oculares son propios de la edad adulta, la realidad es que los niños pueden presentar las mismas alteraciones visuales que los adultos, como miopía, hipermetropía, astigmatismo o incluso patologías más complejas.

Por ello, es esencial realizar revisiones periódicas de la vista desde las primeras etapas de la vida. Un diagnóstico precoz y un tratamiento adecuado ayudan a prevenir complicaciones y aseguran que el niño disfrute de una visión clara y saludable.

En el Institut Oftalmològic Felip cuidamos de la visión de los más pequeños con el máximo rigor y dedicación. Nuestro equipo médico ofrece una atención especializada, cercana y adaptada a las necesidades de cada niño, fomentando hábitos saludables y garantizando el correcto desarrollo de sus capacidades visuales y, con ello, de su bienestar general.